De forma casi improvisada cantamos el Día del Pescaíto. Debido a la hora de cantar ( la 1 de la madrugá) y a la falta de dirección, la cosa salió "regulín", pero nosotros nos lo pasamos genial.
Aquí estábamos en el pasillo "rescondios" y ensayando, antes de que nuestro querido público (que ya estaba un poco "chispao") nos recibiera con una cálida ovación.